Mi nombre es Mónica Andrea Santellán, tengo 44 años, estoy anotada con fecha de nacimiento un 25 de febrero de 1968 en Avellaneda y hace 10 años me di cuenta de la verdadera situación de mi vida y la verdad me lleno de ganas de vivir. Yo lo sabía ! Según me contaron soy hija de Marta Eva Riguetto y de un militar ( del que no sé nada ).
De mi madre biológica sé que era una adolescente que trabajaba en casa de un médico que cumplía funciones en el Hospital Rivadavia y allí contactaron con quién luego sería mi tío y padrino, Roberto Coronel, un empleado del laboratorio.
En el momento de mi nacimiento, llevaron a mi madre a parir a una clínica privada de unos conocidos de la familia y apenas nacida me entregaron. Sé que unos meses más tarde, ella fue a ver a mi tío y le preguntó por el bebé , del que no sabía el sexo; entonces le mintieron y le dijeron que era un niño y que se lo habían llevado a vivir al sur del país. Y ella volvió una vez más a preguntar por mi, entonces le volvieron a mentir, diciendo que el bebé se enfermó y murió.
Este relato me causó mucho dolor y no entiendo que tiene que ver esto con "adoptar" un hijo para darle amor. El peso de la apropiación, pudo más que el amor y la felicidad que alguien quiere brindarle a un hijo. Y lo que sé es que el cuerpo mantiene guardada toda esa información que la mente no puede descifrar y yo siempre me sentí desconectada y sin raíces. Sólo el amor y la afinidad con mi padre
( quien fue adoptado a los 5 años ) me salvaron de esta tristeza y soledad en la que vivo desde que tengo uso de razón. Porque me desconectaron de mí misma.
Lamentablemente, perdí la esperanza de encontrar a mi madre biológica, pero no dejo de intentar todo lo que sea necesario para ser feliz.
Estoy sorprendida por la cantidad personas que estamos en la misma situación y agradezco muchísimo este espacio para encontrarnos y defender este derecho. Ojalá nos quisiéramos más y mejor. Cariños.
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